Carta Apostólica
“El rápido desarrollo”
del Sumo Pontífice Juan Pablo II
a los responsables de las Comunicaciones Sociales
24 de Enero 2005
La Iglesia esta llamada en la actualidad a integrar el mensaje de la Salvación en la nueva cultura haciendo uso de los medios de comunicación para difundir el Evangelio.
Estos medios han alcanzado tal importancia que para muchas personas ya que representan una guía e inspiración en su entorno individual, familiar, social y laboral.
Haciendo uso de la responsabilidad y libertad, los medios de comunicación deben promover la justicia, la solidaridad, la paz, la verdad y sobre todo dar lugar a la expresión de diversas opiniones contribuyendo a un bien común.
Dando respuesta al mandato de nuestro Señor Jesús “Vayan por el mundo y proclamen la Buena Nueva a toda la creación” la Iglesia puede ampliar los confines de la Evangelización, la Catequesis y formación, haciendo uso de estos medios en esta época de comunicación global, enfrentando el reto de mantener una comunicación verdadera y libre para un progreso integral del mundo con la ayuda del Espíritu Santo.
Estos medios han alcanzado tal importancia que para muchas personas ya que representan una guía e inspiración en su entorno individual, familiar, social y laboral.
Haciendo uso de la responsabilidad y libertad, los medios de comunicación deben promover la justicia, la solidaridad, la paz, la verdad y sobre todo dar lugar a la expresión de diversas opiniones contribuyendo a un bien común.
Dando respuesta al mandato de nuestro Señor Jesús “Vayan por el mundo y proclamen la Buena Nueva a toda la creación” la Iglesia puede ampliar los confines de la Evangelización, la Catequesis y formación, haciendo uso de estos medios en esta época de comunicación global, enfrentando el reto de mantener una comunicación verdadera y libre para un progreso integral del mundo con la ayuda del Espíritu Santo.
Elaboró: Leonor Ma. Benítez Ortega
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